La nueva Ley Orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual, conocida como la “Ley del solo sí es sí” obligará a que las empresas que tengan implantado en su organización un sistema de ‘compliance’, lo actualicen o realicen un nuevo análisis de riesgos para determinar la posible comisión de este tipo de delitos en su estructura.
Es decir, las compañías tendrán que establecer medidas para evitar, por ejemplo, que se difundan en el seno de su organización videos o imágenes de carácter sexual a través de teléfonos de empresa para eludir cualquier tipo de responsabilidad.